En una de las grandes vías de Valencia encontramos esta residencia familiar, una vivienda clásica renovada. Con 120 metros cuadrados de superficies, ahora cuenta con cocina abierta al comedor, tres dormitorios, dos baños, vestidor, estudio y lavandería.
La vida gira alrededor de la cocina, vinculada con el salón y abierta a la casa a través del pasillo. La madera y el blanco componen la gama de tonalidades de este proyecto.
El dormitorio principal cuenta con doble vestidor, una zona de estudio y un baño en suite.
El baño de la habitación principal deja a la vista una de las vigas de piedra de la construcción original. Con este elemento imprimimos robustez a un diseño esencialista.
La vivienda cuenta con un segundo dormitorio. Ambas habitaciones cobran calidez con los estampados de las paredes.
El acceso a la lavandería se encuentra en la cocina, a través de una puerta enrasada y oculta a la vista.
Cerveró Proyectos 